Sin gluten. Si eres celíaco o conoces a alguien que lo sea, seguramente hayas oido en más de una ocasión decir estas dos palabras. Y es el único tratamiento eficaz para la enfermedad celiaca es una dieta sin gluten. El gluten es una proteína que se encuentra en la semilla de cereales como trigo, cebada, centeno y derivados y posiblemente avena.
Pero, ¿y el aceite? ¿Puede consumir aceite de oliva una persona celíaca? Por supuesto que sí.
En este artículo vamos a ver el porqué, analizaremos los motivos por los que, de hecho, una persona que padezca este tipo de enfermedad debe consumir el aceite de oliva. Son muchos sus beneficios, veamos de qué se trata.
El aceite de oliva, ingrediente ideal para los celíacos
Por supuesto, y sin ninguna duda, las personas celiacas de cualquier edad pueden consumir nuestro tan conocido oro líquido. Cocinado o crudo, da igual el modo de preparación. Si tú padeces la enfermedad celiaca o conoces a alguien cercano que la padezca, presta mucha atención a lo que comentamos a continuación.
Para empezar, como ya hemos dicho en anteriores artículos, las propiedades del aceite de oliva son innumerables para nuestro organismo. Una de las principales deriva de su alto contenido en ácido oleico.
Aunque las propiedades dependerán en gran medida de la variedad de aceituna, la forma en la que se procesa el aceite y los procedimientos de almacenaje, el aceite de oliva destaca por su alto contenido en vitamina E y polifenoles, que ayudan a reducir los niveles de colesterol malo. En el caso de personas con diabetes, por ejemplo, el aceite de oliva es su mejor aliado a la hora de rebajar los niveles de glucemia.
Además, el consumo habitual de aceite de oliva mejora la circulación y fortalece los huesos, lo que resulta muy beneficioso para las personas adultas. Además de reducir los niveles de colesterol, ayuda a la asimilación de grasas. Y no sólo eso, sino que además mejora la digestión y favorece el tránsito intestinal.
Por todo ello, el aceite de oliva es muy recomendable no solo para las personas celiacas, sino que todo el mundo debería incorporar el aceite en su dieta diaria. Además de nutritivo, es muy sabroso y delicioso.
Ahora que sabes que un celiaco puede consumir aceite de oliva, es hora de entrar en la cocina y ponerse a cocinar.
- 1 cebolla picada
- 3 cucharadas de aceite de oliva
- 1 kg de calabacines
- 2 huevos, 125 ml. de leche
- 3 cucharadas de Maizena
- 3 cucharadas de queso rallado
- 100 g de bacon,
- Sal, pimienta y nuez moscada